El pasado 24 de julio, el ciclista británico Chris Froome levantaba los brazos al cielo en la Avenida de los Campos Elíseos de París como ganador de la 103ª edición del Tour de Francia. Nadie invirtió menos tiempo que él en cubrir los 3.519 kilómetros de la carrera; y fue Tissot, cronometrador oficial del Tour de Francia, quien da fe -mejor que nadie- de ello.

89 horas, cuatro minutos y cuarenta y ocho segundos. Esa es la medida rotunda -y más certera, imposible: ha sido la relojera suiza Tissot la encargada de su medición- que encapsula en cifras la gesta deportiva del ciclista británico Chris Froome, el ganador de la 103ª edición del Tour de Francia, la carrera ciclista más exigente, prestigiosa y popular del mundo.

 

Chris Froome, tras cruzar la línea de meta en la última etapa del Tour de Francia 2016. © Tu Gran Viaje
Chris Froome, tras cruzar la línea de meta en la última etapa del Tour de Francia 2016. © Tu Gran Viaje

Mientras contemplábamos en directo desde la tribuna de Tissot en la línea de meta cómo se hacía con el triunfo en la última etapa el alemán André Graipell, el director de Tissot España, Javier Núñez, nos explicaba la complejidad e implicación de la relojera suiza en Le grande boucle, en la que ha sido, además, la edición de su debut como cronometrador oficial. Ha sido la de Tissot una presencia absoluta y total, que va mucho más allá del simple patrocinio y que consiste, bajo el paraguas de la plataforma Swiss Timing del Swatch Group -que engloba, entre otras enseñas legendarias de la relojería mundial, a Tissot-, en el diseño y la implantación de la tecnología necesaria para que algo tan complejo como el cronometraje de una carrera ciclista de este nivel sea, simplemente, perfecto. ¿El mejor ejemplo? En los reñidos sprints de etapas -como la 16ª, por ejemplo-, llegadas masivas en los que el ganador se dirime por distancias inapreciables para el ojo humano y que solo esta tecnología -capaz de tomar 10.000 imágenes por segundo- es capaz de dilucidar.

 

Tecnología en tu mano para detener el tiempo

Una de las consecuencias más directas de esa excelencia alcanzada en la tecnología relojera es que se traslada a nuestro día a día, sin necesidad -¡ya nos gustaría!- de sufrir en la carretera en pos de la gloria deportiva. Tissot nos acerca su saber hacer en una colección especial, compuesta por seis modelos adornados por los colores emblemáticos del Tour -ese amarillo legendario…- para todos los gustos: para los más clásicos – el Tissot PR 100 o el Tissot PRC200, con una correa NATO que aporta un toque adicional de estilo-, los más deportistas -los modelos Tissot T-Race, disponibles en blanco o negro, con un diseño que recuerda a las piezas de la bicicleta, como el disco de freno-, o los más exigentes -ahí está para ellos el Tissot T-Touch Expert Solar, que funciona por energía solar y presenta múltiples funciones táctiles como la previsión meteorológica, un altímetro y una brújula. Una colección perfecta para detener el tiempo en el momento que queramos, para convertir cualquier segundo especial en un momento irrepetible, un momento Tissot.

 

tissot tour de francia

… Y un París delicioso repleto de #TissotMoment

Y de ellos, de momentos Tissot, estuvo repleta la jornada final del Tour de Francia. A ser espectadores privilegiados de la llegada triunfal del pelotón, se sumó el pasear por un veraniego París tan bello como siempre, a conocer de primera mano las bondades de la colección especial Tissot Tour de Francia en el Restaurant Matignon y a poner un broche al domingo realmente inolvidable en el cabaret Lido. 

 

Tissot Cronometrador Oficial del Tour de Francia 2016. Tu Gran Viaje