Canseco & Mesteño, el nuevo espacio gastronómico de Jesús Almagro


Canseco & Mesteño en Tu Gran Viaje
© Enrique Gómez de las Heras / Tu Gran Viaje

Y decir “espacio gastronómico” no es una perífrasis, ni es un recurso periodístico, ni siquiera es un rodeo. Es decir la verdad. La pura verdad. Porque Canseco & Mesteño es precisamente eso, un lugar donde se puede comer sentado o de pie, beber una botella de vino de 300 euros, una caña bien tirada o un cóctel servido con primor. Y eso, nos guste o no, es un espacio gastronómico.

El nombre del local -de ahora en adelante lo llamaremos así, porque espacio gastronómico puede terminar cansando al lector- es tan singular como su emplazamiento y su filosofía. Canseco & Mesteño son, en realidad, dos espacios diferentes aunque unidos entre sí: Canseco es la zona de barra, informal, donde picar algo o tomar una cerveza al salir del trabajo. Debe su nombre a Antonio Canseco, un relojero español del Siglo XIX que fabricó uno de los primeros relojes sin pesas. Reloj que inspira la concepción de la cocina del chef Almagro: milimétrica, estudiada, sincronizada y basada en la perfección de sus engranajes.

Por su parte, Mesteño es un caballo. Bueno, no uno, sino toda una raza de caballos, concretamente la que presta su silueta al emblema de Mustang, la marca americana de coches e icono del American Way of Life. Esa potencia, esa bravura, esa naturaleza libre y creativa es la que Almagro quiere compartir con sus clientes a través de la carta del restaurante. Porque eso es lo que es Mesteño, aparte del caballo: la zona con mesas y sillas, la de mantel de hilo, la de comer comer o de cenar cenar.

Canseco & Mesteño en Tu Gran Viaje

Cenar en un palacio

Decíamos que el emplazamiento de Canseco & Mesteño es singular, y lo es. Se encuentra en el NH Collection Palacio de Tepa, una de las joyas de la corona de la cadena hotelera por su ubicación, por sus instalaciones y por sus cinco estrellas como cinco soles. Y ahora, claro, por su gastronomía. En la planta baja de este antiguo palacio del Siglo XIX, en el mismo lugar que hace ciento cincuenta años ocupaban las cocheras, se ha instalado el restaurante y barra de Jesús Almagro. La decoración del local, de inspiración otoñal, ha corrido a cargo de Carmen Jabaloyes, una artista de talento amiga del chef. El estudio Aries Interioristas se ha encargado de la configuración y ambiente de ambos espacios.

De Jesús Almagro se pueden decir algunas cosas. Una, por ejemplo, es que es el chef español que mejor clasificación ha conseguido jamás en el concurso internacional de cocina Bocuse D’or, el más exigente y prestigioso del mundo. Otra es que ha sido durante muchos, muchos años el jefe de cocina del restaurante de Pedro Larumbe, convirtiéndolo en uno de los referentes de la gastronomía madrileña. Otra cosa es que sí, hablamos del mismo Jesús Almagro que participó en la primera edición de Top Chef. Y una más: nos estamos refiriendo a uno de los cocineros españoles más precisos, elegantes y obsesionados con alcanzar la perfección. Y no va por mal camino.

Jesús Canseco, en acción en  Canseco & Mesteño
Jesús Almagro, en acción en Canseco & Mesteño. Foto © Tu Gran Viaje

La carta, las cartas

Entrando por fin en pomada: ¿qué se come y cómo se come en Canseco & Mesteño? En el restaurante, es decir, en Mesteño, hay dos menús y también se puede comer a la carta. Los menús hacen un recorrido por la cocina de Almagro, deteniéndose en platos tan atractivos como la vieira asada con naranja, hinojo y perlas cítricas, el ravioli de buey de mar, con citronela, estragón y lima keffir (uno de los productos fetiche de Almagro), o las diez verduras ecológicas con jugo de jamón ibérico. El primer menú cuesta 75 euros (95 con maridaje de vinos) y el segundo 120 (150 con el maridaje).

En Canseco la oferta es amplia, muy amplia, y divertida, muy divertida. Dentro de la carta podemos encontrar grandes clásicos, como los ibéricos, los quesos, la ensaladilla o las croquetas; platos con cierto tono de evolución y vanguardia, como la mazorca de foie gras, el pulpo braseado con patata morada o un corte de dos sabores, que en realidad es de bacalao y naranja; un abanico de pescados (ojo a las sardinas ahumadas, están de muerte), otro de verduras de temporada y otro de carnes. ¡Y pucheros! Sí, sí, Jesús Almagro tiene en su carta verdinas, callos con garbanzos y albóndigas, entre otros platos caseros y ricos.

Redondea la oferta de Canseco & Mesteño una carta de vinos de las buenas, de las que no consigues pillar al sumiller en un renuncio, y una barra de cócteles donde Israel Gómez se esmera con cada copa como si fuera la última. Cerveza bien tirada, equipo de sala atento y amable (con Eva Viera a la cabeza) y ambiente acogedor. Y no hay más. Pero es mucho.

Canseco & Mesteño. Tu Gran Viaje